OSTEOPATÍA EN RECIÉN NACID@S
El tratamiento de bebés y niños proporciona momentos mágicos como el captado en esta foto en mi consulta. ¿Qué valoramos en un bebe? Evidentemente muchas cosas, pero una de las que más nos importa es comprobar su potencial para cambiar. Un recién nacido es un ser que cambia constantemente y esa capacidad llega a nuestras manos; lo llamamos empuje fluídico. Debe existir libertad en su eje longitudinal, un sistema nervioso capaz de expresar todo su potencial de movimiento, una coordinación correcta de las respiraciones primaria y torácica…. El Osteópata con sus manos, sostiene y acompaña los cambios que provocan la expresión de una fisiología diseñada para tener éxito. Permite la regulación de aquellos ritmos que se han desacompasado y que llevarán al bebé a una mejor relación con la Salud. Esto puede traducirse a nivel clínico en menor irritabilidad (tranquilidad, sueño), mejor fisiología digestiva (cólicos, reflujo, estreñimiento…), mejor fisiología respiratoria (bronquitis, otitis….), mejor relación estructural (plagiocefalia, desalineamientos…) y por supuesto colocar al sistema en las mejores condiciones posibles: Prevención.
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