CAMBIO CONTINUO
Como seres vivos estamos continuamente cambiando aunque no lo percibamos. Ese cambio es muy evidente para todo el mundo durante primeros días de vida. Es el momento para que el osteópata sea un punto de apoyo, un Ser sin yo que permite, mediante su visión, la re-información de las necesidades expresadas en la totalidad por la respiración primaria. Una intención justa dará acceso a la Verdad.